Carta de Presidente del Galicia por elecciones en Federación

Elecciones en la Federación de Sociedades Españolas de Argentina

Por Héctor Fernández Álvarez

* Presidente Centro Galicia de Buenos Aires

Todo indica que el próximo lunes 28 de abril se cristalizará en la Federación de Sociedades Españolas de Argentina un hecho no habitual en su vida institucional, la existencia de dos listas que dirimirán en las urnas la futura conducción de la Entidad, lo que obliga al Centro Galicia de Buenos Aires, luego de un prudencial silencio, a dejar sentada su posición, sea ante la comunidad en general, como ante tantas y tantas entidades hermanas con las que trabajamos codo a codo todos y cada uno de los días del año para, cada una en su área específica, mejorar la situación de los españoles en Argentina y la de sus instituciones representativas.

Decimos que estamos frente a un hecho no habitual, porque, como todos sabemos, es ya una tradición dentro de la Federación que la conformación de sus órganos directivos surja de un amplio consenso de las entidades que la conforman, consenso que, año tras año, es liderado por la entidad que en ese momento está ejerciendo la Presidencia, que es la encargada de efectuar las consultas del caso con el objeto de lograr la más amplia y genuina representación de todas las instituciones y autonomías en esa conducción.

Constituye, asimismo, otra tradición que a la entidad que está en ejercicio de la Presidencia de la Federación se le otorgue un segundo mandato de dos años de forma que pueda concretar adecuadamente sus planes, y así ha sido en la mayoría de los casos, incluidos el del candidato a Presidente de la otra lista y el del apoderado de ésta.

Ambas tradiciones, que fueran una de las bases del equilibrio y la buena convivencia en la vida institucional de la Federación, fueron destruidas con la irrupción de una nueva lista generada por fuera de todos los mecanismos habituales y sin la más mínima intención de plantear un diálogo constructivo previo, que, curiosamente, es encabezada por dos ex Presidentes de la Federación, D. José Manuel Sánchez Naveros (1996-2000), como candidato a Presidente y D. Marcial Sánchez González (2002-2006), como Apoderado.

El trabajo conjunto de tantos y tantos años fue borrado de un plumazo en aras de fines ajenos a la Federación, sin importar las inevitables derivaciones negativas que se producirán.Profesamos devoción por los debates y el diálogo, pues cuando son de buena fe, conducen a conclusiones y consensos siempre deseables, pero, pese a ello, no rehusamos la contienda democrática, tan necesaria para dirimir las diferencias, sobre todo cuando son de modelos o de valores y en ese sentido, expresamos enfáticamente que no compartimos los personalismos, que alguna vez sufrimos en carne propia en nuestra Casa, porque estamos acostumbrados a trabajar orgánicamente, en conjunto, en equipo, en pos de las instituciones, sin importar a quién le toca transitoriamente regir sus destinos.

Nos preocupa, y mucho, que se hayan dado pasos sin medir las consecuencias, ni importar el deterioro que se le puede generar a la Federación y a la colectividad en su conjunto.
No han respetado la extraordinaria gestión llevada a cabo por los directivos que ahora finalizan sus mandatos que en al año 2006, quienes al hacerse cargo de los destinos de la Federación con la Presidencia del Centro Montañés y las Vicepresidencias 1º y 2º del Centro Galicia y del Centro Asturiano, respectivamente, encontraron a una entidad técnicamente en quiebra, sin dinero, prácticamente sin actividad, sin inscripción vigente en la AFIP y con legajo atrasado en la Inspección General de Justicia.

Esos dirigentes, pese a tal situación, no perdieron las esperanzas y con inteligencia, creatividad, pluralidad, respeto, perseverancia, esfuerzo, trabajo y el apoyo incondicional de todos, diseñaron un plan de crecimiento institucional para sacarla de su letargo, proyecto que contó con el unánime respaldo de las entidades y del cuerpo diplomático, que brindaron lo mejor de sí para que la Federación pudiera salir adelante y, con ella, toda la colectividad.

La masiva Fiesta de la Hispanidad del año 2006 que se llevó a cabo en el Campo Galicia de Olivos, cedido con total beneplácito, constituyó un quiebre respecto de la vieja política y el comienzo del despegue institucional.

El amargo e inesperado fallecimiento del entrañable amigo D. Antonio Alvarez Prellezo, uno de los promotores de esa nueva forma de conducir a la Federación, obligó a que nuestro representante, Arturo Pérez Domínguez debiera asumir la Presidencia y completar el mandato del extinto titular, según lo establecen claramente los estatutos institucionales, hecho ratificado por unanimidad por la Asamblea del mes de abril del año pasado, a instancias del señor Sánchez Naveros.

La gestión de la Comisión Directiva presidida por D. Arturo Pérez Domínguez mantuvo y amplió la línea trazada y así, además de mantener los actos anteriores y repetir una excelente Fiesta de la Hispanidad, organizó encuentros corales, de música celta y de grupos infantiles, realizó seminarios que abordaron la problemática de la mujer y la formación de jóvenes dirigentes, desarrolló y puso en funcionamiento la página Web de la Institución, recibió al candidato presidencial D. Mariano Rajoy y despidió al Embajador y Cónsul General de España en sendas reuniones realizadas al efecto, todo ello en el mismo marco de inteligencia, creatividad, pluralidad, respeto, perseverancia, esfuerzo y trabajo por el conjunto descripto anteriormente y posible gracias a la labor de todo ese grupo y de las restantes entidades que se sumaron al trabajo mancomunado sin reclamar nada a cambio y que posibilita que la nueva conducción que se hará cargo de la Federación luego de realizada la Asamblea del próximo 28 de abril, encuentre en la caja de la Institución más de $ 100.000 disponibles para seguir encarando proyectos que esperamos, resulten en beneficio de la comunidad toda.

La lista que auspiciamos, con la continuidad en la Presidencia de la Federación por este nuevo periodo de dos años de nuestro representante, D. Arturo Pérez Domínguez, es por demás representativa de todos los rincones de España, y a sus integrantes no se les preguntó a qué partido político o sector pertenecían, sino que se les planteó la necesidad de estar plenamente consustanciados con una forma de conducir las entidades tendiente a consagrar todos los esfuerzos en el desarrollo de las mismas y de su gente, dejando de lado intereses mezquinos, sean ellos de carácter personal, partidario o sectario.

Estamos seguros de que esta lista, la nuestra, la de todos, de la misma forma que fueron capaces de sacar a la Federación del más profundo de los abismos y, por tener el suficiente respaldo financiero, ponerla en condiciones de hacer proyectos serios, no de formular meras utopías, seguirán trabajando con todo ahínco con nuevas y mejores ideas, incluidas las relacionadas con los festejos del Bicentenario, cuya concreción requiere de decisiones que no sean adoptadas por un grupo de “iluminados”, sino por el grueso de las entidades en su conjunto, en Plenarios cuyas resoluciones sean cumplidas efectivamente, en las que importe la palabra empeñada, sin que luego se traicione la voluntad soberana de las entidades.

Confiamos plenamente en que las entidades hermanas elegirán, de manera abrumadora, el modelo que rige en la enorme mayoría de ellas, aquél que tiene por único y noble objetivo que el trabajo del conjunto y de sus dirigentes esté orientado exclusivamente al beneficio de las mismas entidades y de la gente y no a satisfacer apetencias personales o en provecho de un solo grupo o sector.

Remitido por directiva@centrogalicia-bsas.org - 22 de abril de 2008